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VI Día de los árboles y los áridos

Más de 50 jóvenes de Alicante participan en el VI Día de los Árboles y los Áridos en la cantera Fontcalent de Holcim

La Asociación de Empresas de Áridos de la Comunidad Valenciana (ARIVAL) ha celebrado este mañana, en la cantera Fontcalent de Holcim Áridos, el VI Día de los Árboles y los Áridos, con la presencia, entre otros, del director general de Energía de la Conselleria de Industria y Comercio, Antonio Cejalvo y del director general de Medio Natural de la Conselleria de Infraestructuras, Territorio y Medio Ambiente, Alfredo J. González. En el acto han participado más de 50 niños del Colegio Público Los Almendros de El Rebolledo y de la Asociación de Disminuidos Psíquicos de Alicante.

El objetivo de este evento es promover el conocimiento de la actividad del sector de los áridos (canteras y graveras), favorecer el acercamiento a la sociedad e inculcar a los niños, de entre 10 y 14 años, la importancia de cuidar y respetar el medio ambiente. Para ello, esta mañana, han plantado más de 200 árboles de diferentes especies. También se les ha explicado el proceso de vida de una cantera, desde que se inician los procesos de extracción hasta la posterior restauración. Además, se han podido ver, en las zonas ya restauradas de la cantera de un grupo importante de ovejas que viven en este hábitat.

La cantera de Fontcalent es un ejemplo claro de cómo llevar a cabo un buen proyecto de restauración en una cantera. De hecho, en octubre de 2012, Fontcalent fue premiada por la Federación de Áridos, con el premio de “Buenas prácticas medioambientales”. Fontcalent ha contribuido con el desarrollo de las infraestructuras de Alicante.

En la inauguración, Antonio Cejalvo, ha comentado que explotaciones como esta que visitamos hoy “son absolutamente necesarias para proveer de las materias primas a la Comunidad Valenciana y así, poder desarrollar todas las infraestructuras”. En este sentido, Alfredo J. González ha dicho que este es un “acto especial ya que compatibiliza la educación ambiental, ya que los niños que están hoy aquí, lo están viviendo en primera persona, con una empresa que está sabiendo compaginar su actividad productiva con la restauradora”.

Por su parte, Ximo Magalló, presidente de Arival ha asegurado que la importancia de este día, “que se celebra en toda España, es que los niños se involucren y vean lo que es una cantera y entiendan que lo que sacamos de la naturaleza, luego, a través de restauraciones como estas, volvemos a devolvérselo. Las materias primas que se extraen de las canteras son el segundo producto que más emplea el ser humano y, por tanto, no puede existir un mundo sin árido”.

Arival se suma de este modo un año más a la celebración nacional de esta jornada, que es una iniciativa de la Asociación Nacional de Empresarios Fabricantes de Áridos (ANEFA), integrada en la Federación de Áridos (FdA), en colaboración con la Agrupación de Fabricantes de Cemento de España (OFICEMEN). Hoy han participado cerca de 3.000 escolares de toda España, que han visitado alguna de las explotaciones de su entorno próximo inscritas en la iniciativa (canteras o graveras), que en esta ocasión han sumado 30, de 20 empresas, distribuidas en 11 comunidades autónomas y 17 provincias.

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Una clase al aire libre

Las canteras y graveras ofrecen una oportunidad única de poder aunar el conocimiento práctico de la procedencia de los áridos – arenas, gravas y rocas trituradas – y de su proceso de producción, con el respeto por el medio ambiente. Los niños normalmente quedan fascinados cuando descubren el origen de sus casas y escuelas, y cuando ven cómo operan los camiones dumper, las palas cargadoras o las retroexcavadoras, todos ellos de grandes dimensiones. Si, además, tienen la posibilidad de poder plantar un árbol y comprobar cuáles son las estrictas medidas de seguridad que se aplican, la experiencia es inolvidable.
La existencia de cerca de 2.000 explotaciones, en España, hace que sea posible encontrar una cantera o una gravera en el entorno de cada colegio o instituto.

Una industria esencial

La industria de los áridos es una gran desconocida de la sociedad. Mucha gente piensa que una cantera o una gravera es un simple hueco en el terreno. Esta industria ocupa, sin embargo, un destacado lugar en los cimientos del desarrollo económico y contribuye a que podamos mantener una elevada calidad de vida. Los áridos son materiales esenciales que se emplean para construir gran parte de los elementos que nos rodean en nuestra vida y de los que nunca nos paramos a pensar en su origen, desde los edificios donde vivimos, al colegio o el instituto, pasando por las calles y las carreteras.

Los áridos también se emplean para fabricar productos tan importantes como el vidrio con el que se hace las ventanas o los vasos, el papel de libros, cuadernos y periódicos, acero para los coches o los cubiertos, cosméticos, pasta de dientes, medicinas, ordenadores y hasta para producir la energía eléctrica que nos alumbra o que permite ver la televisión o jugar a los videojuegos. Por eso no es extraño que cada persona – niños y mayores – consuma, sin saberlo, 4.600 kilogramos de áridos cada año, es decir, más de 12 kilos al día.

Su repercusión económica va más allá, pues la construcción, que produce una parte importante del Producto Interior Bruto, es totalmente dependiente de las canteras y las graveras. Es una industria que crea empleo y riqueza en las áreas rurales, ofreciendo un futuro profesional a los jóvenes. Unas 80.000 personas trabajan en el sector de los áridos, bien directamente, bien conduciendo los grandes camiones que llevan los áridos por la carretera.

 

 

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